La jardinería en macetas de interior nos permite a los que no tenemos espacio para camas elevadas o una gran parcela de jardín cultivar asimismo nuestros propios alimentos. ¿Desea tener más control sobre las condiciones de cultivo y menos malas hierbas? La jardinería en macetas es una enorme forma de aumentar al máximo su espacio de jardinería y racionalizar sus labores de jardinería.
La belleza de un jardín en macetas de interior es que puede ubicarse prácticamente en cualquier sitio. Incluso si se trata de una o dos macetas en el lado de su camino de entrada o en el rincón de su balcón, la jardinería en contenedores le deja maximizar todo su espacio libre.
A fin de que las plantas medren sanas, se precisa un suelo sano. Las plantas en macetas precisan los mejores nutrientes, la mejor aireación y el mejor drenaje posibles para que las raíces crezcan sanas y generen una buena cosecha.
No utilizar tierra del jardín. La mayoría de las tierras del jardín son demasiado pesadas, pueden mojarse y compactarse con sencillez y albergan enfermedades e insectos. En su lugar, utiliza una mezcla de tierra para macetas "sin suelo" formulada particularmente para su uso en contenedores. Será de drenaje rápido y ligero, y no debería contener enfermedades ni plagas.
Al estar más expuestas al sol y al viento, las macetas de interior tienden a secarse más velozmente que los jardines tradicionales o las camas elevadas. Singularmente durante los días más calurosos del verano, muchas plantas cultivadas en macetas deben regarse hasta dos veces al día.
Las macetas pueden regarse de varias maneras: con mangueras, con regaderas o con riego por goteo. Escoja el procedimiento que mejor se adapte a y al tamaño de su jardín.